Este tema, que es el primero que publico desde 2016, nace de querer explorar una estética urbana en una canción simple. La canción nació a principios de 2017, apenas después de haber publicado mi último EP “2016” y el segundo disco de Lxs Tremendxs “Nuevos Tiempos” (banda en la que compongo y canto) y se refería un poco al llegar a ciertos lugares, a concretar objetivos y a buscar nuevos estímulos para seguir el camino de lo creativo. La canción quedó en un cajón (en uno de esos que a veces se abren y revisan). Desde 2016 hasta final de 2019 puse muy la energía en grupos en que estaba tocando la batería (Tomi Lebrero, Daiana Leonelli, Juega el loco), también en Musiquita en la cocina (proyecto que llevo adelante desde 2014 en el que hago videos de músicxs tocando en cocinas) mientras experimentaba con distintas herramientas y búsquedas nuevas expresiones. Para 2020 había decidido dejar varios proyectos para enfocarme de nuevo en mis canciones. La idea era hacer una gira por España e Italia (ya tenía 12 conciertos confirmados). Obviamente el aislamiento hizo cambiar de planes y llevó a que la exploración sea muy hacia los adentros.
“Ahora que” volvió a aparecer en un momento en que estaba experimentando mucho con el Ableton Live y con un Microkorg. Venía ya haciendo algunos instrumentales pero nunca había mezclado la canción con lo programado. Empecé a probar con este tema y de pronto empezó a aparecer un personaje cantando que por momentos me incomodaba. En una charla con Marcelo Ezquiaga, músico amigo que admiro y con quien de hace tiempo habíamos pensado grabar algo salió de puro impulso seguirlo trabajando con él. El tema estaba más o menos armado pero no terminaba de sonar. En el trabajo con Marce le fuimos laburando el audio llevándolo a un lugar muy hi-fi (soy más de sentirme cómodo en el lo-fi, pero ya que me incomodaba el personaje, ya fue, a habitar lugares nuevos). Le agregamos detalles, agregamos samples de mi voz (es lo que suena en la parte instrumental), agregamos al ritmo de batería que había programado unos detalles con una MPC que a Marce le habían prestado y unos sintes más. En tres días de trabajo ya pasó a manos de Ovie, que fue quien lo masterizó. Esto fue en agosto de 2019. El tema volvió al cajón que se abre y cierra. No encontraba una imagen que acompañara la música. Tuve juntadas, de todo, pero no aparecía. Un día un amigo que vive en Chile y vino y paraba en casa (Sebastian Ciavaglia, audiovisual parte de Musiquita en la cocina) volvía del Trimarchi a las 3 am. Me propuso hacer unas fotos “urbanas” a esa hora. Elegimos atuendo a distancia. Llegó, salimos, se largó a llover. Cambiaron los planes pero logramos la foto de la tapa en el que apareció un personaje que parecía ser el que cantaba. No encontraba cómo hacer el diseño, proyecto ya con foto, pero al cajón de nuevo. En el medio empecé a trabajar en una obra en que lo vocal lo uso como canal de voces de otros tiempos, de otras dimensiones (obra que saldrá en un mes y algo), y me alejaba de lo urbano. Reapareció por una casualidad en mis días ya de cuarentena una amiga y diseñadora, Laurie Gius. Tras unas charlas sobre proyectos artísticos retomamos el de éste tema y armó el diseño, que me encantó. Le dió más expresión aún a ese personaje (que lleva de nombre IV – es un cuatro romano y son mis iniciales y que en otras canciones retomaré).
Si bien tenía ganas de terminar primero esa obra que explora otras voces y compartir eso primero, me pareció de repente estos tiempos en que lo que se mueve estimula, un buen momento para hacerlo. Espero lo disfruten.